martes, mayo 22

El espejo de tus ojos


¿Por qué nuestro reflejo es tan cruel y escurridizo? Presente pero huidizo. La sombra no es tan cruel. La sombra se alarga y se encoje clavándonos a la tierra, intentando recordarnos el lugar que tenemos en el mundo. Peter Pan bien lo sabe. Aunque él se negaba a darse cuenta, la sombra estaba de su lado.

El reflejo no.

El reflejo juzga. Incisivo. Mira con mis propios ojos, no miente ni adorna. Sus verdades se escabullen y habitan allá donde vaya. Me persigue sin descanso, atrapándome en una cuchara, en una ventana o en un lago cristalino. Me grita lo que no quiero oír.

Supongo que desear lo imposible es parte de lo que nos hace humanos, deseos lo suficientemente grandes como para no perderlos de vista por el camino, que decía Faulkner. Qué ironía. Lo único que yo anhelo esno volver a ver ese reflejo.

Por eso. Por eso me río cuando me preguntas por qué te necesito. No es por tu sonrisa ni por tus caricias, no es por cuánto me haces reír o porque siempre puedo contar contigo. Te necesito por cómo me miras, por cómo disimulas una sonrisa cariñosa cuando olvido algo importante, por cómo escuchas con atención una opinión mía y por cómo me regañas cuando no veo en mí lo que tú ves. Te necesito porque has tirado un muro que no quiero volver a levantar.

Quizá estoy equivocada. Quizá mi reflejo sí esté de mi lado y todo este tiempo lo único que buscaba era escurrirse y colarse en tus ojos, enseñarme lo que tú ves.

Ahora sólo me queda la esperanza de haber sido capaz de abrir mi mirada al tuyo.

lunes, enero 16

eBook for Dummies

Imagen: Cristian Turdera.
Estas navidades han sido las del Kindle. Con la entrada de Amazon en España, la gente se ha vuelto loca por entrar en el escabroso y frustrante mundo de los libros electrónicos. Como dije en su momento, la industria editorial sigue en su rincón intentando evitar tomar las decisiones necesarias para adaptarse a un entorno que ya ha cambiado. Es por esto que, salvo excepciones, comprar un eBook en este país sigue siendo una aventura digna de los cánones de Joseph Campbell.

Pero como muchos ya tenéis vuestro nuevo y flamante lector de libros electrónicos, he decidido hacer una entrada compartiendo algunas cosas que he aprendido estos más de dos añitos que llevo con el mío.



Calibre
Lo primero e imprescindible que necesitas si estás estrenando un eReader, es el Calibre, una maravillosa herramienta que será tu central de conversión de formatos y tu biblioteca personal. Ordena todos tus libros, almacena sus versiones, permite pre-visionados y notas post-lectura… En este enlace tenéis una guía para iniciaros en el programa. Además, hace muy pocos días, Calibre ha lanzado una versión portable del programa, muy útil para llevar tu biblioteca en una memoria extraíble y compartirla con quien quieras.

#ComparteCultura – Dónde descargar eBooks. 
Soy defensora de que la cultura hay que pagarla. Soy cliente Premium satisfecha de Spotify, he puesto mi grano de arena en 1libro1euro y pago los 80 céntimos que cuestan los cómics digitales de Fringe. Sin embargo, con la cultura aún son excepciones esos casos en los que se puede comprar algo a un precio razonable y generalmente me encuentro a mí misma buscando un libro para descargar después de buscarlo infructuosamente por los canales oficiales. Sea por el precio, por la falta de novedades en edición digital o incluso el formateo penoso del eBook, al final no dejan otra opción.

En este recomendado artículo de Kurioso sobre el tema de la cultura compartida tenéis muchísimas páginas donde encontraréis libros electrónicos en descarga. Yo quería destacar y añadir alguna de ellas.

PapyreFB2: Biblioteca inmensa con ediciones cuidadas y una comunidad activa que aclara duda y corrige errores. El formato es para Papyre (que es mi eReader) pero con el Calibre eso se soluciona en un plis plas.


jueves, diciembre 1

Épica para mamarrachos

Si es que he nacido en la época equivocada. A punto de acabar 2011, una encuentra muy difícil protagonizar momentos épicos. No puedo ser una inglesita victoriana dispuesta a romper con todos los esquemas ni una franchute liderando airosa al ejército gabacho en pleno siglo XV.

Tampoco he tenido la suerte de nacer en una realidad molona: no me pueden resucitar con un beso ni puedo pelear contra cylons, puro en boca. Por supuesto me olvido de las orejas puntiagudas. Ni siquiera me dejan juguetear con un cetro relampagueante… aureeeoooolaaaaaa.


Por eso he decidido inventarme mi épica urbana para mamarrachos. Ha sido todo fruto de la casualidad; os cuento. Yo había quedado en la estatua del Oso y el Madroño, una de las casas de citas oficiales de Madrid. Saliendo del metro, iba escuchando mi lista de bandas sonoras de Spotify cuando empezó a sonar la intro de Juego de Tronos. Casualidades de la épica, justo en ese momento yo estaba en las escaleras mecánicas que dan a la salida del pez de cristal de Sol. Me descubrí a mí misma ascendiendo hacia la luz, triunfal, con una corriente de aire dándome en la cara y con la música de Ramin Djawadi sonando. Fui la diosa de durante medio minuto

Días después, caminando por una calle perfumada elegantemente con Eau de Pis, un hombre que volvía de incumplir todas las pautas de adictos anónimos se acercaba a mí haciendo gala de su mejor imitación zombie. Justo en ese momento, sonaba en mis auriculares Dream is Collapsing de Hans Zimmer. Ya sabéis: pooooooooo, pooooooooo. Con la música me dio tanto cague que estuve a punto de ponerme una camiseta de algodón blanca e irme a correr horrorizada por un césped en pleno riego.

Entonces me golpeó. No, el infectado no, una idea. La idea de la épica urbana para mamarrachos y mamarrachas de bien. ¿Que perseguís al perro por la casa porque se acaba de mear en la alfombra del salón? Doc to the Rescue. ¿Qué estáis inspiradísimos escribiendo la entrada de blog de vuestra vida? Briony. ¿Qué ves el autobús a lo lejos y aún te quedan 200 metros por salvar? To die for. ¿Qué estáis descubriendo el maravilloso mundo de las pelusas bajo el sofá? What’s this. ¿Qué váis en bici a por el pan al Ahorra Más? End Credits de ET

Si algo nos ha enseñado el cine es que una secuencia rancia y aburrida se convierte en épica con la banda sonora adecuada.

La fotografía es de Christian Stoll. Podéis ver más de su épica urbana aquí.

viernes, octubre 7

Dirección de cine indie for dummies

El cine indie es un vasto mundo por explorar al que cada año tengo más acceso gracias a mi visita obligada al Festival de Cine de San Sebastián. El cine independiente es un bisnes que me llama la atención, me gusta el tipo de historias que se manejan en las que generalmente los personajes y el tono están por encima de una narración al estilo más tradicional. Por supuesto, el cine indie independiente nos llega en todas formas y colores, inspirando a jóvenos y jóvenas a hacer sus propio cine de culto snob y gafapastoir. Por ello, quiero comparto mi inútil sabiduría adquiridaen forma de guia para el autoestopista intergaláctico que además quiere ser director de cine alternativo.

LA ELIPSIS NO EXISTE.
Este es probablemente el punto más importante de toda la guía. Los seres humanos tienen la manía de dormir, eso lo sabemos todos. Cuando se despiertan, habitualmente se desperezan, se duchan, se lavan los dientes, desayunan y se visten. Una buena historia indie es realista y cortar estas actividades es un delito.

No olvidéis tampoco la importancia de los silencios. Si un personaje acaba de sufrir una tragedia, métele en un coche y que conduzca durante 8 minutos de metraje. Serio. En silencio. El espectador conectará con la inmensidad de sentimientos que pasan por su mente sin importar el gesto impasible del rostro.

USA SOUNDTRACK PARA MODERNILLOS
El cine indie tiene que ir acompañado de música indie. Cualquier grupo de rock alternativo es buena opción pero aquellas formaciones de nombre desconocido cuyos integrantes lleven pantalones de pitillo y un aire setentero son la elección óptima. La combinación eficiente del último punto con música para modernos gafapastas es la gran virtud del buen cineasta indie.

EL PODER DE LA REFERENCIA
Tus personajes deben reflejar tu profunda cultura artística y, por tanto, son necesarias referencias al expresionismo alemán, a las ideologías pacifistas de finales de los 60 y a algún bar excéntrico de Berlín. Evita las citas de procedencia y temática económica salvo para hacer referencia a lo obsceno que es el capitalismo.

UN PLANO A CONTRALUZ ES UN PLANO GANADOR
Con tanto realismo, tanta verdad narrativa y planos contemplativos, el atractivo visual es un requisito en el cine indie. Como producción independiente, un presupuesto reducido da caché por lo que hay que echar mano de esa directora de fotografía llamada naturaleza. El campo y la nieve son siempre buenas opciones y priorizando los planos a contraluz que, ocurra lo que ocurra, tienen el poder de convertir una secuencia en romántica, melancólica, nostálgica o poética.

De momento, con estas indicaciones tenéis un punto de partida suficiente como para aventuraros a realizar vuestra primera película independiente, ya estáis un paso más cerca de conseguir un póster con tu propio espiga de Sundance.

miércoles, julio 13

Tirando y levantando muros

Quizá llegue tarde.
Probablemente siempre fue tarde.

Se que no soy gran cosa, al menos no en el sentido figurado. Además, soy difícil. No siempre ha sido así. Los agostos playeros familiares, que con el tiempo se convirtieron en un suplicio, solían ser divertidos. Mira a Adri, han pasado cinco minutos y ya tiene tres amiguitos. Habitualmente, la gente afirma que los veintiuno o los dieciocho son las mejores edades, en las que se quedarían viviendo para siempre. Sin embargo, yo siempre pienso en mis diez añitos, cuando todo eran dibus, tostadas con nocilla y la casa del árbol.

Yo era de esas que escribía diarios. Aún guardo el primero que tuve. Me lo regalaron por mi cumpleaños, supongo, porque la fecha de la primera página es 28 de Septiembre de 1993. Diez años. El “Querido Diario” va seguido de ilusionados relatos sobre un diente que se mueve o la duda de si pedir a los Reyes Magos una BMX roja o azul (¡Qué tiempos cuando con esta edad aún éramos niños...!). Hay un par de páginas especialmente emocionadas sobre el nuevo camuflaje estilo cebra que mi padre pintó a la casa del árbol. Pensándolo me viene una sonrisa nostálgica a los labios. Sé que nunca seré tan feliz como entonces.

Todo es culpa nuestra… aspiraciones, sueños, deseos, ilusiones... Cuando somos renacuajos esas palabras significan un viaje a Disneylandia o unos patines nuevos. Ahora no. Ahora solo sabemos que las tenemos. Con frecuencia es algo abstracto como los temibles felicidad, estabilidad o amor. Otras veces son pequeñas cosas que se nos hacen un mundo, como mi lucha por no ser tan desmemoriada.

Con la madurez, cada uno tiene una forma de afrontar los golpes. Yo me hice con unos ladrillos para construir un muro, un escudo de ironía y de aparente fortaleza e indiferencia muy efectivo por fuera pero destructivo por dentro. Este absurdo muro camufla los sentimientos entre sarcasmos y el dolor entre sonrisas. Tras atravesarlo, algunos sin esfuerzo y otros con asedio, se han encontrado a la persona insegura, cobarde y sensible que soy.

Ignoro si no has visto el muro o has decidido dar media vuelta, pero hoy vengo aquí, sin coraza, sin rodeos, sin dobles sentidos, para enseñarte lo que pocos han visto. Una parte de mí que no conoces. Una que quizá te guste. Una que quizá te haga verme con otros ojos. Una que te haga dejarlo todo para intentar conocerme y, con suerte, quererme.

Yo, por si acaso, ya he empezado a apilar ladrillos.


jueves, julio 7

Cuando lo decente se convierte en lo excepcional

Las secciones nacionales de cualquier diario español están inundadas con políticos corruptos y electos, ladrones con presunción de inocencia, ministras que defienden tasas ilegales, una oposición anclada en la descalificación que no ofrece alternativas o un tardío y desinformado relato de movimientos de ciudadanos indignados.

Ilustración por Pawel Kuczynski

Sin embargo, es a nivel personal, a nivel de calle, cuando una pierde toda fe en el carácter de los españoles. Generalizar es polémico pero pone sobre la mesa ciertas verdades y una de ellas es la extendida ausencia de civismo y moralidad de nuestra sociedad. Algunos dirán divertidos que es picaresca. Yo digo que es sinvergonzonería.

Esta mañana escuchaba en la radio los testimonios de varias mujeres que viven una realidad que he conocido de primera mano gracias a Mira, una madre de familia búlgara que ayudaba con las tareas de la casa años ha en casa de mis padres. Mira, cuyo verdadero nombre era tan impronunciable que improvisamos un diminutivo, era trabajadora y cariñosa. Vino a España junto a su marido, que tiene un ojo único para los cuidados del jardín, y dos hijas en busca de una vida mejor y estaba dispuesta a darlo todo por conseguirlo. Mi señor padre hizo todos los trámites necesarios para que tuviera sus papeles en regla, su seguridad social y demás burocracia que es obligación y, lo más olvidado, derecho de todos.

Mira es una persona muy agradecida. Por aquel entonces yo pensaba que hasta demasiado. Años más tarde de dejar de trabajar para nosotros, seguía visitándonos constantemente con entusiasmo, regalos y hasta lágrimas. ¿Por qué? Ser una empleada del hogar en este país es una lotería. Por una parte están las familias normales que tratan a estas mujeres como merecen pero la gran mayoría pertenece a ese sector que dicen “la chica que tenemos en casa” cuando quieren decir “la esclava que me he agenciado”.

Internas con un sueldo de quinientos euros que libran la tarde del domingo y viven con el terror de caer enfermas y ser despedidas, madres con unos hijos que requieren atenciones inesperadas que se ven a sí mismas rogando a sus jefes que le den dos horas para ir al médico, inmigrantes que piden educadamente firmar un contrato con unas condiciones dignas mínimas y se encuentran con la puerta en las narices... Lo que nosotros veíamos como lógico y normal, Mira lo sentía como una suerte que algunas amigas suyas no habían tenido.

Cuando lo decente se convierte en lo excepcional, los bares se abarrotan de ciudadanos a los que se les llena la boca hablando del paro, de las hipotecas y de las inadmisibles condiciones laborales mientras tienen alguien en casa que limpia, cocina, cría a los hijos e incluso se encarga de servir en cenas de amigos, con horarios inhumanos, por unas cantidades ridículas, beneficios fiscales nulos y, a veces, un trato frío.

Ya no se trata de no querer pagar un precio razonable por un servicio cuando hay alternativa gratis, de dejar salir antes de entrar, recoger las cacas del perro o conseguir una afamada beca por contactos y no por logros, ni siquiera de la desviación de fondos o la corrupción política; al final del día todo recae en quién somos como personas y como ciudadanos. No podemos sentarnos a esperar una sociedad mejor si nosotros no somos capaces de gobernar con decencia, dignidad y sentido común nuestra propia vida y cómo nos relacionamos con los demás.

Por cierto, Mira está estupendamente. Tras muchos años de trabajar duro en varias casas y jardines, por fin ha podido cumplir el sueño de abrir un negocio familiar y regentan una pequeña casita rural en Burgos.

lunes, junio 20

¡Perfecto! ¡A Imprenta!

Hoy se han lucido. Después de vaticinar la tercera república como si del Apocalipsis se tratase, La Razón ha hecho hoy alarde de los beneficios del tampón de clonar de Photoshop para vacíar una plaza y, de paso, cortar un par de cabezas.
Y como es mejor no entrar en escabrosos detalles como el fantabuloso titular de la portada, vamos a quitarle hierro al asunto con otros ejemplos de incompetencia photoshoperil.

Amanda Seyfried, tamién conocida como NECKCILLA

Está claro que el que retocó esta foto había suspendido "Cuellos II" en su master de photoshop... ¿Has visto lo que ha hecho la guarra de tu peluquera?. Por cierto, el que suspendió "Cuellos I" también tiene curro, lo podéis ver aquí.

Angie, Angie... menos mal que se lo hiciste con el brazo y no con la boca...

Esto es como cuando un amigo cojonero te hace una de esas preguntas mierder tipo "Tú qué preferirías tener, ¿cara de polla o de vagina?". Pues yo casi prefiero lo de Angelina a lo de Beyoncé.

Esto... mmmm... "- Señor productor, tengo el poster para la película, creo que quedará satisfecho. -¡Oh! ¡Incredibol!¡A imprenta inmediatamente!". No puedo añadir nada más.

Tampón de clonar: inflando presupuestos de plantilla desde tiempos inmemoriables.


Hay tanto photoshop mamarracho y vergonzoso que mejor parar a tiempo.

lunes, junio 6

La sala de cine es una jungla y esta es su fauna.

Me gusta ir al cine. Me gusta la experiencia de sentarme en una butaca con la pantalla gigante frente a mí y el sonido envolvente. No hay mejor forma de disfrutar una película que entregarte a ella completamente en la oscuridad de una sala de cine.

Cuando yo era una jovenzuela inocente, la gente respetaba la santidad de las salas y una mala experiencia durante una sesión era la excepción. Ahora es la regla. Una fauna de irrespetuosos inaguantables puebla las butacas sin que aquellos que vamos a ver la película (¡Qué osados!) podamos hacer nada.

Entre las especies más comunes podemos encontrar al comedor de palomitas compulsivo. Palomitus Devorae. Si debemos encontrarnos con alguna, un espectador con cubo de palomitas es lo mejor que nos podría tocar. Lo difícil de convivir con ellos llega sólo al final, cuando sólo le quedan un puñado de palomitas que dedica a remover en el fondo del cubo como si estuviera preparando una poción mágica. Precaución: en algunas situaciones, esta especie concreta podría incluso dar rienda suelta a su yo más musical usando el cubo como bongo.

Dentro de la clase de los Comívoros, cada vez más frecuentemente encontramos una evolución de Palomitus Devorae llamada Envoltorius Crujientonia. Estos también comen, pero ante toda una fila de opciones han decidido que las chocolatinas con envoltorios plasticosos y patatas crujientitas son la mejor opción para comer en un ambiente silencioso.

Sin embargo, esta es una clase primitiva que se deja llevar por sus instintos innatos, mientras que los Charlópodos, son simplemente el resultado de una evolución hacia la falta de respeto. Si analizamos la proliferación las especies de esta clase en los últimos años desde un punto de vista darwiniano, llegaremos a la conclusión de que pronto podríamos tener una tierra dominada por mamarrachos maleducados. Dentro de los Charlópodos encontramos varias especies que paso a enumerar:

Histericum vulgaris: La que se ríe hasta cuando el protagonista respira con sonidos histriónicos que sólo entienden los perros. Si ciertamente hay un momento propicio para la risa, estos especímenes generalmente emitirán su sonido a destiempo. JiiiiiiiiiJiiiiiiiJiiiiii.

Raphaelis Aramisae: El más listo del lugar, que anticipa lo que va a pasar a continuación y lo comparte su inteligencia y lógica supremas con todos los que le rodean. Acaba de comprar un chicle y un clip, va a construir una bomba.

Impacientum narratum: Al contrario que el anterior, esta especie no sólo no es capaz de adivinar lo que va a suceder a continuación sino que además se muere por saberlo. ¿Qué va a pasar ahora?¿Donde va?¿Porqué hace eso?.

Paletus Sylvestris: Los que ven la película como si estuviesen en el salón de su casa o la sala estuviera vacía. Una conducta cada vez más frecuente en esta especie es la de utilizar el respaldo de tu butaca como su reposapiés personal. Es más, estudios de campo han demostrado que 8 de cada 10 veces, estos individuos contestarán al teléfono si les suena en mitad de la proyección. ¡Eh! Qué pasa, tío! Nada, aquí, en el cine.

Absurdis Cortimer: El que no se entera de nada de lo que está pasando. Estos están siempre en simbiosis con otro elemento que va explicando con detalle todo lo que ocurre en pantalla, también conocidos como Offvoice Complejum. Se conocen casos de unión entre los Absrudis Cortimer y los Raphaelis Aramisae.

Estas son sólo alguna de las especies que podemos encontrar hoy en día en nuestras salas. No son las únicas, claro. Más de uno se habrá encontrado con los padres que ignoran a sus hijos aunque estén saltando en la butaca, los abuelos que se quedan dormidos y roncan como jabalies o yo incluso me encontré alguien con madera para protagonizar Mejor Imposible que liberaba su trastorno obsesivo compulsivo leyendo TODO lo que aparecía escrito en pantalla, desde los créditos hasta los carteles de la calle. Por suerte, las salas de versión original de momento sólo albergan Gafapastus Máximus y sus comentarios tipo "¡qué bien aguanta el primer plano!".

En fin, desgraciadamente, parece que este tipo de gentuza no hace más que proliferar en las salas y nos queda una opción: mamarrachocidio.


miércoles, junio 1

Canta como puedas (The spanish Mic)

Hay anglosajones cantando en español que me dan la vida. El esfuerzo de algunos es admirable y el resultado más que aceptable, como es el caso de Phil Collins en Tarzán. Pero es una excepción.

Primer problema: la traducción. Queridos productores musicales americanos, todos sabemos que el señor Google es un semidios pero, teniendo en cuenta la cantidad de población hispana que hay en vuestro país, no creo que sea muy complicado encontrar a alguien que apañe la construcción de las frases con sus tiempos verbales correctamente para que la cosa tenga algo de sentido. Parece que no fue posible en el caso de “Si yo fuera un chicó” de Beyoncé. Sí, chicó, con acento. Ejque, claro, a ellos no les enseñaron eso del sujetp-verbo-predicado. . Pero peor es cuando hacen un Lost in Translation. Roxette alardeó de este superpoder en “No se si es amor”.

Pero hay otro problema… Nosotros hablaremos inglés macarrónico pero que me digan a mí que clase de español canta Bon Jovi en su Cama de Rosas. En “Lo que soy” todo el esfuerzo se fue en adaptar la letra porque la forma de comerse letras de Demi Lovato no tiene nombre.

Claro que tampoco es que nosotros seamos muy duchos en esto de cantar en inglés. La pobrecita Alicia Keys se esfuerza todo lo que puede para tapar a un Alejandro Sanz cantando en algo que parece ser que quizá sea posible que es inglésOoooooh, mai sisteeer. Por supuesto, no hace falta mencionar a este indudable clásico de el Príncipe Gitano.

Pero hay una mamarracha que los supera a todos, los atrapa y los ata en las tinieblas: Avril Lavigne. Su Girlfriend en español lo tiene todo: canción mamarracha, pronunciación mamarracha y letra mal traducida porque, sí, todos sabemos que I know that you like me significa “Yo se que me gustas”. Su acento macarrónico de no intentarlo en absoluto no es lo peor que podría hacer. NO.
  • Versión japonesa. Esta era la fácil. Sílabas simples sin erres dobles ni sonidos como “dr” o nuestra “c”. Es la mejor versión que vais a escuchar, AVISO.
  • Versión italiana: Un par de pelis de mafiosos neoyorkinos y el acento estaba pulidico pulidico. Es un horror igual que el español pero, al menos, se identifica como italiano.
  • Versión alemana. Estoy siendo benevolente pero incluso esta puede valer. Así de lejos entornando las orejas puede hasta identificarse como algún tipo extraño de idioma germánico.
  • Versión portuguesa: Con esta versión tiene que invertir todo su esfuerzo mental en colar las sílabas extras en los pulsos de la canción. No seáis tampoco tan exigentes, hombre.
  • Versión chino mandarín o cómo editar la voz y colarla a 1.5x para que de tiempo a decir toda la frase. Al lado de esto, la versión portuguesa es virtuosismo lingüístico.


Pero la versión definitiva es y siempre será la francesa. Y digo francesa porque eso pone en el título oficial del EP que contiene todas las versiones porque si lo llego a escuchar sin ninguna referencia, bien me podría haber creído que cantaba en esperanto o en na’vi, para el caso.

En fin, volviendo al castellano, hay pruebas vivas en el día a día de nuestra existencia de que es complicadísimo de pronunciar y no importa que lleves aquí 20 años trabajando en televisión y radio y no mejores un pelín poquirrinín de nada tu acento.. ¿Verdad, Michael Robinson? ¿Verdad señor del inglés con mil palabras?

viernes, mayo 27

Por eso se reían del discurso del Presidente

¿Qué pasaba? Carcajadas estruendosas en el pabellón de afasia, precisamente cuando transmitían el discurso del Presidente (…). Ahí estaba, el viejo Encantador, el Actor, con su retórica habitual, el histrionismo, el toque sentimental… y los pacientes riéndose a carcajadas compulsivas. (…) ¿Qué podían estar pensando los pacientes?¿No le entendían?¿Le entenderían, quizás, demasiado bien?

Así comienza el noveno capítulo de El Hombre que confundió a su mujer con un sombrero, título divulgativo escrito por el neurólogo Oliver Sacks en el que explica de forma didáctica, amena y con ejemplos específicos algunas patologías neurológicas. En este caso en concreto, El Discurso del Presidente, Sacks introduce al lector en el mundo de la afasia.

La afasia afecta principalmente al lenguaje. Aquellos que la padecen no son capaces de entender o mantener una conversación, no descifran el sentido de una frase ni asocian una palabra a algo concreto. Comprenden las palabras por separado quizá (hay muchos tipos de afasia) pero no le dan un sentido o lo olvidan rápidamente.

Ante esta dificultad, muchos pacientes afásicos desarrollan otro tipo de compresión. El habla, como cuenta Sacks, no consiste en sólo palabras sino en la expresión y, aunque los que sufren la enfermedad no entiendan el sentido de las palabras como tales, es el entendimiento de esa expresividad tan profunda, compleja y sutil lo que potencian. Esa expresividad involuntaria y espontánea que no se puede falsear con tanta facilidad como las palabras. Incluso los afásicos ciegos potencian matices como la entonación, el timbre, el ritmo y las cadencias que restan o suman verosimilitud a las palabras de una persona. Entienden sin palabras.

Eran, por tanto, esas muecas, histrionismos, gestos, cadencias y tonos falsos de la voz lo que sonaba a falsedad para los pacientes. No podían engañarlos las palabras. Por eso se reían tanto del discurso del Presidente.

Y diréis ¿qué pasa con aquellos que son absolutamente sordos al tono y la expresión aunque conserven intacta la habilidad de entender las palabras? Estas personas padecen agnosia tonal y no son capaces de captar la emoción o intención en una voz. Se concentran en las caras, las posturas y los movimientos de las personas al hablar: una paciente concreta de Sacks descubrió que prestar una atención extrema al sentido preciso de las palabras y cómo se usaban le ayudaba a comprender mejor el lenguaje expresivo y compensar su incapacidad de entender el lenguaje evocativo.

Esta mujer escuchaba, junto al resto, el discurso del Presidente. Pero seria. – No es convincente- decía-. Utiliza las palabras de forma incorrecta. O tiene una lesión cerebral o nos oculta algo.

Sacks concluye este capítulo así: Esa era, pues, la paradoja del discurso del Presidente. A nosotros, los individuos normales (…) se nos engañaba genuina y plenamente. Y el uso engañoso de las palabras se combinaba con el tono engañoso tan taimadamente que sólo los que tenían lesión cerebral permanecían inmunes, desengañados.

No soy una persona que frecuente los temas políticos pero leyendo este artículo me ha venido a la mente todo lo acontecido en nuestro país en las últimas semanas. La reflexión que subyace entre las palabras de Oliver Sacks es mi pequeña aportación.


PD: La ilustración que acompaña al texto es del artista polaco Pawel Kuczynski. Echadle un ojo a su obra, merece mucho la pena.

miércoles, mayo 25

Yo, además de mamarracha, soy FRIKI.

Si es que… ¡Qué poca previsión de futuro! Voy y escribo un post sobre frikis a menos de dos semanas del día en el que se celebra nuestra condición de marginados culturales. Para compensar, ahí van unas anécdotas y datos frikis en torno a mi persona.

Un día, estaba tan enganchada al último libro de una saga que iba leyendo mientras caminaba. Alguno conocerá la boca de metro de Ciudad Universitaria, que es casi tan empinada como la escalera del paso de Cirith Ungol. De no ser por un caballero que me cogió al vuelo, habría dejado un “Adri estuvo aquí” en forma de sesos sobre los peldaños. Ah, y no. No viví feliz para siempre con el caballero. Le miré a los ojos con sonrisa agradecida (y aún confundida) y él puso cara de alt6 (ya sabéis “¬¬”) y me dijo: Ten más cuidadito. The end.

Hace unos años participé en un torneo de los cuatro magos que organizamos unos amigos. Incluía tres pruebas relacionadas con la saga con las que se ganaban hechizos para lanzar durante la cena, en la que había cerveza de mantequilla digna de Hogwarts. El premio era la varita oficial de Dumbeldore. Yo me tuve que conformar con la que me hice yo misma con un palillo chino, lana y purpurina exprimida directamente de Edward Cullen.

Tres de los cuatro magos con nuestras cartas de invitación e instrucciones.
Yo salgo con mi varita digna de Art Attack.

Puedo comparar casi cualquier momento de la existencia con una secuencia de Friends. De hecho, la combinación de Friends y Padre de Familia me da el poder de la referencia eterna, poder que entre mis amigos ya produce más grillos que risas.

Puedo cantar varios de los openings y endings de Kenshin. En japonés. Y también canto de memoria el rap del Señor Maligno. Con coreografía incluída.

Desde día siguiente de salir a la venta el Prince of Persia: Worrior Within, me sentaba a jugar después de cenar, como a las diez de la noche, y me acostaba a las cuatro de la mañana. No por sueño, no, sino porque trabajaba en el departamento de informática de mi universidad y a las nueve de la mañana tenía que estar abriendo la sala de acceso libre. Hasta que acabé el juego, no la abrí antes de las diez. Me gané merecidamente el odio del alumnado.

Desde el ReLoad, pasaron casi seis años hasta que Metallica sacase un disco nuevo. En ese tiempo escribí una canción con mensaje tipo “sacad disco ya” utilizando una combinación de frases de temas suyos.

Cuando La Comunidad del Anillo de Peter Jackson estaba en camino, siempre miraba la distribuidora de las películas que iba a ver al cine… OJOCUIDAO como fuera de Aurum, que me pasaba todo el “momento trailers” en plan yo se donde está curro pero pidiéndole a todos los dioses, los viejos y los nuevos, que pusieran el de El Señor de los Anillos.

De hecho, para el estreno de las dos primeras partes de la saga, fui disfrazada al estreno. Yo tan feliz con mis pies de hobbit tan curraos y era llegar al Kinépolis, toparme con los de la Sociedad Tolkien y sus disfraces dignos de extra de la películas, y querer darle a Robert Arryn una alegría tirándome por la ventana.

Tengo un póster casi a tamaño natural de Roland Deschain de Gilead. Pero no le he dado un beso nunca… aún.

Como todo seriéfilo que se precie, tengo mi record-maratón y la afortunada es 24. Un septiembre, mis amigos estaban encerrados estudiando y yo, que no tenía ningún examen, decidí aprovechar el aislamiento para ponerme al día con la serie. Vi la mitad de la tercera, la cuarta y la quinta en cinco días y medio. Hasta planchaba con Jack Bauer.

Ya he demostrado mi calidad de mamarracha lo suficiente por hoy. Esto son minucias superficiales. Ya veremos si en el próximo día del orgullo friki confieso cosas más vergonzosas :P

lunes, mayo 16

Frikis: de la discriminación al ostracismo

Vaya chasco, la todopoderosa RAE no considera la palabra “friki" como merecedora de estar en su diccionario, haciendo compañía a palabras como muslamen u obrón, con lo chachi piruli que queda empezar una entrada como ésta con una definición. Citaría la Wikipedia, la siguiente opción lógica de fuente enciclopédica, pero creo que paso el límite de mamarrachadas por entrada. En vez de eso pondré esto:

Si buscas "Friki" en google imágenes, las búsquedas relacionadas son:
FEO.
Y ya.


Yo he vivido ese tiempo en el que ser un friki era peor que no saber lo que era una ducha. A veces tenía el valor de admitir a un humano random que prefería planes tipo tranqui con los amigos para jugar a rol o ver alguna película. Las reacciones se movían en una escala que iba desde “Te levanto una ceja con desaprobación” hasta el “me voy corriendo a casa a marcar mi puerta con sangre de cordero”, pasando por cosas como “cara de Rajoy mirando a Camps”, “cara de Amy Winehouse cuando le da a pagar la renta” o “cara de Paris Hilton cuando le toca barrer”.

A pesar de que el término se ha ido corrompiendo con el tiempo, que es otro tema, últimamente parecía que la sociedad nos estaba aceptando. Para todo hay niveles, usando niveles como eufemismo de enfermos, pero casi podíamos decirlo con orgullo… hasta hoy.

Hace cinco días, la Fnac desterró a un friki en su tienda de Madrid Callao, donde le tendrá durante diez días viviendo. El friki hace las frikadas que se esperan de él mientras las cuenta en twitter, Facebook y un blog. Ah, y le siguen unas cámaras. Ah, y se hace fotos con gente que le señala diciendo “¡Eh! Ese es el friki que vive aquí”. Todo tiene su lado positivo: tiene 5000€ en artículos para llevarse a casa.

En la web oficial incluso hay una agenda detallada con las actividades de tan noble friki... ¡Qué digo! De noble nada, que se cree una persona cualquiera y tiene descansos en su horario. ¡Descansos! Vive rodeado de comics, libros, películas, discos, manga, videojuegos, gadgets electrónicos... y se atreve a descansar. ¡Tienes una comunidad a la que representar, pedazo de mamarracho!


lunes, mayo 9

Besando, besando, triunfé twitteando.

(pincha en la foto para verla más grande)

Resulta que aquellos que usamos twitter tenemos relaciones sentimentales más cortas que los que no lo hacen. Claro, es normal. Ya lo estoy viendo. ¿Quién es esa a la que le haces replies? ¿Por qué le retuiteas tanto? ¡Deja de twittear que cambiamos del perrito al misionero, joder! No me olvido de los hashtags #fotosdeminoviababeandomientrasduerme y #calzonesdeositosdemichico. Y es que nos lo buscamos nosotros solitos. Esto de las relaciones en 140 caracteres nos vuelve poco constantes y comprometidos.

Pero, como todo en la vida, menos el maquillaje de risketos de Valentino, esto tiene una explicación científica: usar redes sociales tiene el mismo efecto en nosotros el mejor de los morreos. Sí. Parece que recibir un comentario positivo de alguien en facebú o tuiter genera la producción de la llamada hormona del amor y claro, después de estar todo el día quemando Echofon, una llega a casa embriagada de oxitocina y no puede evitar ir haciendo la cobra a la pareja… ¿Qué quiere, que me de un coma twittílico? Así que, al final, tu chico analógico decide buscarse una chica 1.0 a juego.

Somos las víctimas. Se esfuerzan en banalizar nuestra única fuente de amor diciendo que el 40% de lo que escribimos y leemos son chorradas. ¡Insensibles! Twitter será un patio de vecinas pero… ¿No ven que nuestras mamarrachadas es lo único que nos queda?

Así que ya lo sabéis, cada vez que me hagáis retwitt o un reply amable a mi cuenta de twitter, será como [erotic] entrelazar apasionadamente nuestras húmedas lenguas mientras los labios se rozan con delicadeza [/erotic] . Eso sí, cuidado con los #followfriday, que no quiero que nuestra relación vaya demasiado rápido.


miércoles, mayo 4

Un champú para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas

Una azafata se inclina hacia mí y me dice amablemente que debo desconectar mis aparatos electrónicos durante el despegue. Señala al iPhone y al eReader. Que interfiere con el sistema de mando, dicen. Yo no quiero ser desconfiada, pero a mí eso de que crean que la tinta electrónica puede acabar con un Airbus A320 me da mala espina. Ochenta toneladas al carajo por jugar al Angry Birds (sí, chaval del 15E, oía los “oyyyyyyy” mientras despegábamos).

Vale. Aceptamos iPhone como arma de destrucción aérea, que yo entendiendo que haya seguridad en los aeropuertos. Lo que me supera es la incoherencia y la contradicción.

La poderosa cajita delatadora de líquidos malignos revela el botecito pulverizador de mi bolso. Siempre llevo Nenuco, que además de refrescante, viene de perlas si por lo que sea necesito fabricar un explosivo. No lo puedo pasar, dicen, porque no tiene etiqueta. Acepto con media sonrisa pensando en el idéntico bote que va en la maleta que hace rato me espera al final de la cinta transportadora. A mi acompañante le dejan sin su go-mina antipersonas.

Uno puede aceptar que el agente de seguridad te mire con reproche cual madre decepcionada. No es el fin del mundo que me quiten mi pulverizador de colonia, los chinos me venden 3 a un euro, pero los zapatos no, por favor. ¿Y si ese día me he puesto los calcetines que tienen tomates? ¡Qué vergüenza! Menos mal que yo tengo suerte, Vans debe de tener un acuerdo con Aena que les obliga a hacer zapatillas impenetrables e inmodificables, perfectas para un vuelo seguro. Sin embargo, la chica delante de mí lleva tacones, ¡Cómo osa! ¿No se ha dado cuenta de la cantidad de objetos punzantes que pueden esconderse en un tacón de 5 centímetros?

Entonces llega el momento de la verdad: el escáner. Durante ese segundo que tardas en atravesar el arco, tu vida pasa ante tus ojos. Cruzas todos tus dedos para no oirlo pero ya no hay remedio, el dulce cantar del aparato ejerce de reclamo para una señorita uniformada y muy recta dispuesta a palparlo todo. Se han hecho pelis porno por menos. Me resulta cómico que, por ser yo una mujer, me tenga que cachear otra fémina. ¿Es porque compartimos anatomía? Vale que a la muchacha mis curvas le sean familiares, pero vivo para el día que vea el brillo en los ojos de alguna cacheadora. Le sonreiré picarona.

Pasado el umbral del terror, llegas al paraíso de las compras, donde uno puede adquirir a todo tipo de artículos para seguir con los planes malignos que creías frustrados tras atravesar el control. ¡Y libres de impuestos!

Al menos todas las mamarrachadas han servido para hacer más entretenida las horas extras de espera de tu vuelo retrasado.


miércoles, abril 27

Lo que necesita el libro electrónico.

Hay una canción donde Joaquín Sabina enumera esas cosas que no deberíamos hacer si queremos vivir 100 años. Tener un lector de libros electrónicos, e intentar usarlo, es una de esas cosas.

Hace un año, la Federación de Editores afirmaba que, en 2009, la industria del libro había perdido 150 millones de euros por culpa de la piratería. No voy a entrar en lo ridícula que es de esa cifra, sobretodo para la fecha, pero quiero quedarme con el dato para preguntar lo siguiente: ¿Cuántos libros habría tenido que descargar cuánta gente para llegar a esa cantidad de pérdidas? Con este volumen de interés, ¿cómo se explica la actitud impasible de la industria editorial?

Al contrario de lo que piensan algunos, Internet es el presente y el libro electrónico ha llegado para quedarse. Hace un par de años todavía era cosa de unos cuantos early adopters, pero ya no. El estudio de la Federación de Editores de este año asigna al libro digital el 3% de la facturación de 2010. Como no puedo apoyar mis dudas con este dato con números, me limito a contaros mi experiencia personal. Este pasado enero, quise comprarle a un amigo un Sony Reader y no pude: no sólo se habían agotado, sino que desde Sony se disculpaban porque ni siquiera tenían ya piezas para una pronta remesa. La prueba de esto la vivo yo cada vez que subo al metro de Madrid, donde por cada dos o tres libros tradicionales, veo uno electrónico.

Entonces me da por pensar de dónde saca toda esa gente sus libros digitales. Seamos sinceros, descargarse un libro no es fácil: tiene que estar bien formateado, tiene que ser compatible con tu lector, lo suyo es que no sea una traducción cutre de las muchas que se encuentran por la red… y no quiero que suene a que hay que ser doctorado en descarga y optimización de libros digitales con especialización en el buen uso del Calibre, pero lo que está claro es que no hay un librosyonkis y los conocimientos a nivel de usuario no son suficientes.

Y aquí entran las librerías, tiendas que, como la FNAC o La Casa del Libro, ofrecen libros en formato electrónico a precios que generalmente superan el de una edición impresa de bolsillo. ¿Estamos locos?. Pues, o lo estamos, o somos unos mamarrachos... ¿por qué iban a bajar las librerías el precio cuando hay un lector desinformado o inexperto que paga 16€ por el ePub de una novedad? Está claro que lo que les importa en estos momentos a las editoriales es hacer caja, no lectores, y el usuario no hace más que fomentarlo pagando por libros libres de derechos que se pueden descargar gratuitamente en bibliotecas online o que, en muchas ocasiones, están incluídos en la biblioteca que viene con el lector.

A los editores se les llena la boca en su informe con datos de proyectos de digitalización, de aumento de porcentajes de mercado y catálogo, de rebaja de precios y, en general, de planes para revolucionar la industria del libro electrónico en los próximos dos años. Afirman ser conscientes de que el cambio se está produciendo y quieren estar a la altura, pero luego salen con cosas como no tienen prisa ni sienten la presión de experiencias anteriores porque lectores son más fieles al soporte físico que, por ejemplo, en la música.

Es el eterno “Es que no es lo mismo el tacto de un libro, pasar las hojas, el olor …”. Pamplinas. Mi experiencia me dice, y seguro que muchos poseedores de eReader me lo corroboran, que la mayoría de estas afirmaciones nacen de la desinformación y el desconocimiento. Y aquí es donde más ha fallado la industria editorial. Desde la aparición del Kindle y la proliferación del libro electrónico internacionalmente, la actitud española ha sido considerarlo una amenaza hasta que no les ha quedado más remedio y han tomado medidas como la fantástica Libranda, un gran ejemplo de proyecto creado para fracasar y generar argumentos en contra de la piratería mientras consigue convertir la experiencia de comprar un ebook un infierno.

Necesitábamos una industria dispuesta a informar y formar al lector antes de que él se autoenseñe a descargarlos gratuítamente. Que enseñara la verdadera experiencia de leer tinta electrónica, que hablase de las facilidades que ofrece a la hora de leer material en otro idioma gracias a los diccionarios integrados o a la hora de tomar notas en los documentos sin dañarlos, las ventajas en comodidad y espacio, la inmediatez, la versatilidad que ofrece un aparato de lectura con acceso a la red…. Necesitábamos una industria dispuesta a dejar el cortoplacismo a un lado para priorizar la captación de tres lectores que pagasen 5€ por una obra en lugar de conformarse con uno que haga caja por los tres. Era necesaria una industria cuidadosa con los detalles, dispuesta a ofrecer calidad, porque el precio no lo es todo. Necesitábamos una industria orgullosa de invertir en el largo plazo financiando la distribución de eReaders en las bibliotecas públicas. Y lo seguimos necesitando.

Pero, como bien decía Sabina en su canción, sólo nos queda una solución: ir a la farmacia a preguntar si tienen pastillas para no soñar.


lunes, abril 25

¿Quién se creen estos de Spotify?

El apocalípsis ha llegado. Spotify free ha limitado al máximo sus servicios. Sí, como os lo cuento. A partir de mayo sólo podremos escuchar la misma canción cinco veces de forma gratuita y el tiempo total de acceso estará limitado a 10 horas por mes. Traducción: para aquellos que escuchamos tantísima música como yo, será obligatorio pagar 5€ por la cuenta ilimitada o 10€ por la premium.

Esto es intolerable, vamos. Como la comunidad de usuarios del servicio ha aumentado tantísimo en el último año, han visto la oportunidad de llenarse los bolsillos a nuestra costa y ahora una no puede tener ni canción favorita. ¿De verdad pretenden que pague por una canción que me gusta tanto como para escucharla más de cinco veces? ¡Increíble!. Para darles diez euros a ellos, me voy a la FNAC y me compro un disco que pasaré a mp3 y escucharé en mi reproductor todas las veces que quiera. Si hay que volver a un soporte tan obsoleto como el CD para tener la música que me gusta, ¡pues se vuelve! Y así me aseguro de que el artista se lleva el dinero. O bueno... antes de comprar supongo que lo bajaré para comprobar que me gusta y luego ya veremos si compro. ¿Veis? ¡¡Nos empujan a lo que ellos llaman piratería!!

Además, hay cinco euros de diferencia entre la cuenta ilimitada y la premium. Cinco. Simplemente por el hecho de poder llevar la música en el móvil y escucharla donde y cuando quieras sin límite, sin anuncios y sin necesidad de estar conectado gracias a la sincronización offline. Si es que Spotify es el mal. Es tal demonio que ya hablo como los anuncios horrendos esos que me ponen entre canción y canción y que sólo puedo eliminar con dinero, como no podría ser de otra forma.

¿Por qué quieren que pague más? Yo ya pago mi conexión a Internet y mi canon digital cuando compro cacharritos para que la SGAE reparta a los artistas lo que les corresponde justamente. ¿Cinco euros más al mes? Con eso tengo gasolina para ir a la panadería de cuatro manzanas más abajo. ¿Y con diez? Con diez me da para ir yo sola y sin palomitas a ver Furia de Titanes en 3D. Si aquí una tiene sus preferencias.

Me da igual que sea de esas personas que escuchan música el 50% del día como mínimo. Dicen que los primeros seis meses, los nuevos usuarios tendrán las prestaciones que tenemos ahora... pues pienso emplear el tiempo que sea necesario en hacer nuevas cuentas que luego aprovecharé para poder escuchar mi canción favorita 15 veces si me da la gana. No se dónde me han visto a mí la cara de mamarracha.

Esta entrada está inspirada en mamarrachos reales.

jueves, abril 14

Internet está ahí, pero vamos a ver qué pasa.

Hace tiempo que quiero abrir una sección offtopic para hablar de ciertos asuntos que, aunque no entren literalmente en el parámetro “Hablando de series”, afectan al mundo audiovisual en general y considero igualmente interesantes. Y qué mejor tema para estrenar la sección que hablando del nuevo presidente de la Academia de Cine en España: Enrique González Macho.

A raíz de su candidatura y elección, González Macho lleva unas semanas paseándose por medios de comunicación y presentando sus intenciones para con el cine español y lo que le rodea.

Esta misma mañana era entrevistado por Carles Francino en La Ser, donde presentan al invitado con uno de sus conocidos reportajes-lameculos que califican a Internet como monstruo de mil cabezas al que hay que domesticar y valoran alguna de sus declaraciones como “sablazo a los internautas”, entre otras perlas. Realmente no podríamos esperar otra cosa de unos medios que se llenan la boca llamándonos piratas.

Si González Macho ha demostrado algo en sus declaraciones referentes al tema de Internet, es que sabe escurrir el bulto como pocos. Cuando le preguntan sobre la solución ideal al respecto, independientemente de leyes u otros factores, su respuesta es que Internet es el futuro, no es el presente por mucho que se diga. Si yo tuviera la solución estaría en un Yate en las Bahamas. ¡Anda!¡Como los de SeriesYonkis!.

En la rueda de prensa del domingo, tras conocer su victoria frente a Bigas Luna, admitía que le preocupaba el día a día. Internet forma parte de un futuro que no está definido y que no cambiará mucho, pues unos harán contenidos, otros los distribuirán y sólo cambiará la recepción. Complementaba tal conocimiento en otra entrevista de La Ser, donde le preguntaban por el modelo de negocio para el cine en la red. Él respondía: Todavía no lo se, me encantaría ser adivino pero no lo se. Internet está ahí. Es una gran parte del futuro, no me atrevo a decir que todo. Pero vamos a ver que pasa.

Vamos a ver qué pasa”. Esta es la posición del nuevo presidente de la Academia de Cine. En la presentación de su candidatura que podéis ver aquí, decía además que hay un modelo actual que aparentemente está algo caduco -Aparentemente puede ser que quizás puede que estemos obsoletos-. Su gran argumento es que el futuro aún no ha llegado y que nadie puede preveer cómo será. “Todos sabemos que pasará por Internet y las nuevas tecnologías pero habiendo una cosa y otra todavía no, procuremos defender lo que existe hasta que llegue lo nuevo sin perder de vista el ponernos al día en todo lo que está llegando”.

El cambio está sucediendo en todo el mundo. Estados Unidos, país que él tanto se empeña en afirmar que está tan perdido como nosotros, está en pleno cambio, y vemos empresas consolidadas o iniciativas pioneras que implican streaming, Facebook o incluso torrent. Pero aquí no. Aquí somos muy españoles y preferimos sentarnos y desarrollar la política del verlas venir.

Sus pocas alabanzas a Internet son de boquilla y por compromiso. Él mismo se deja en evidencia cuando afirma categóricamente cosas como que "Internet, que creemos que es un arma fundamental del futuro, hoy por hoy todos sabemos que está haciendo una función parasitaria, que no tiene unas regulaciones y circunstancias para proteger a los creadores”.

Internet es un arma fundamental para el futuro, dice, pero no tiene ninguna intención de conocer el arma ni explorar el futuro. De lo segundo ya he comentado suficientes declaraciones para respaldarlo, que bien se puede resumir con su vamos a ver qué pasa. Pero quiero hablar de su desconocimiento del mundo de Internet.

Ya sabíamos que un blog es una web que a menudo publica enlaces ilegales, pero parásitos no se si nos habían llamado antes. Al menos los Piratas tienen barcos y beben ron. González Macho se hace el moderno como fundador de Filmin. Sí, yo soy la primera que defiendo filmin como iniciativa pero soy consciente de sus fallos y de que supone un paso ínfimo en esta área. Parece que él no. Decía en la rueda de prensa que ellos fueron los únicos locos que lo han hecho y los resultados han sido más que negativos. “Se de lo que hablo”. No. No sabe. ¿De verdad pensaba convertirse en el portal de cine en streaming definitivo con un catálogo de películas indies e independientes? ¿No sabe que Avatar, una revienta taquillas, fue la más descargada de su año?. Él mismo admite que han perdido a cierto perfil de espectadores y que la gente no tiene en alta estima al cine español. Él mismo afirma los pobres datos de taquilla de nuestro cine… ¿Pensaba entonces que lo iba a petar con una plataforma donde ofrece ese cine a esos espectadores?. Filmin es más que aceptable para lo que es, pero no nos engañemos.

Sus declaraciones sobre filmin siguen la línea victimista que tanto vemos en el mundillo del cine español. El otro candidato a la presidencia ya dijo en su día, y con muchísima razón, que nadie estaba poniendo el ojo en las empresas de telefonía, que son las que se están quedando con todo el dinero que nosotros pagamos para acceder a los contenidos de Internet. Pero claro, poco tardó en barrer para casa y lloriquear que habría que exigir que pagasen subvenciones al cine español. ¡Más subvenciones al cine español!. Que me subvencionen el blog, ya que están.

González Macho va en la línea cuando se quejaba de que el cine español no ocupa el lugar que se merece en las televisiones. “Las televisiones privadas utilizan espacio radioeléctrico que es de todos y no pagan lo que deberían, además de que su postura frente al cine español deja mucho que desear”. Tócate. Resulta que además de obligar a empresas privadas a invertir un porcentaje de sus beneficios en cine español ahora tienen que hacer de hermanitas de la caridad y programar películas que, como ya sabe González Macho, no interesan a nadie. Pero claro, es mejor patalear porque no les llega más dinero para subvencionar las producciones que hacen para mirarse el ombligo y vivir del cuento que crear títulos pensando en el público.

Un oyente de La Ser ha preguntado por las subvenciones esta mañana, porque no comprende como una película como El Orfanato, que recaudó lo que recaudó, obtiene subvenciones, a lo que él contestado que todas las películas tienen el mismo derecho. No se puede penalizar el éxito. No claro, no se debe. Porque si penalizamos el éxito, a lo mejor también habría que penalizar el fracaso y entonces seguro que no se hacían más de 100 películas al año...

En esta línea victimista también están sus declaraciones con respecto a la versión original. Es un gran defensor de la misma y llama al doblaje aberración, considerándolo una malformación de la obra, aunque dice ser consciente de que no se puede imponer, pero sí fomentar. Hasta aquí una piensa: todo perfecto. Pero no. A González Macho le encantaría imponer la versión original no por la integridad de la obra, no, sino porque considera que las películas extranjeras dobladas son competencia desleal, y eso no es justo.

Pero las pataletas continúan con el tema de la digitalización de los soportes. Lo acepta, casi a regañadientes parece, porque aunque siendo un poquito excluyente, lo han aplicado porque se puede llegar a más sitios, hacer copias más fácilmente… Pero claro, lo identifica como otra “forma de que haya más de lo mismo y menos de lo nuestro. Las cosas son las que son y si se pueden tener 900 copias de una cosa, pues de lo nuestro en vez de 300 a lo mejor hay 100. "

“Cosa”. “Lo mismo”. Habla con términos vagos pero supongo que con “lo mismo” se refiere a cine que recauda y a “las cosas son las que son” se referirá a que la gente va a ver lo que le llama la atención.

Si es que no puede ser… Los espectadores van a ver lo que les llama la atención, la evolución tecnológica odia al cine español con su digitalización y su Internet y además ponen las producciones internacionales dobladas y me hacen la competencia. ¡Jo, qué rollo mami, todos están contra mí!.

Podría seguir hablando de algunas de sus declaraciones, como la respuesta al tema del precio de las entradas. Que vemos la botella medio vacía, dice. Que ir a misa es gratis pero el cafelito de antes y el asado de después no. Mi profe de economía lo llamaba coste de oportunidad... Que no se entere la Iglesia que González Macho está sugiriendo que por lo que te cuesta ir a misa, mejor vas al cine. Aunqe peor es lo que sugiere Francino: que por lo que cuesta ponerte desodorante, vas al cine. Personalmente, si lo que me ofrecen es todo esto... Yo prefiero oler bien.

Mamarrachos todos.